El microcemento es un material cementicio que se utiliza para revestir paredes, suelos, escaleras, sanitarios, muebles.... tanto en interiores como en exteriores, salvo sobre pavimentos flotantes, obteniendo como resultado un recrecimiento de 2 a 3 mm.
Tiene propiedades de impermeabilidad, resistencia, continuidad, diseño y elegancia. Resistente al salfumán y todo tipo de productos de limpieza.
Se puede pigmentar en una gran variedad de colores, pudiendo llegar a combinarlos, realizar dibujos, logos, textos... Terminación con brillo o satinado. Incluso se puede combinar con otros materiales.
Permite personalizar las estancias a su gusto.
Se adhiere sobre cualquier material, por lo que resulta muy interesante a la hora de renovar una estancia, la instalación es limpia y no hace falta hacer obras pasando por molestos ruidos, escombros y largo tiempo de espera. El microcemento se puede aplicar directamente en el azulejo existente, pudiendo tener renovado una cocina o baño en unos 3 días.
Al ser un material con buena impermeabilidad al agua y continuidad (no existen juntas), resulta muy atractivo a la hora de renovar un baño. Gracias a su continuidad da amplitud a los espacios.
El microcemento es un material reparable, si se coloca como pavimento de tránsito, hay que tener más cuidado que con un pavimento porcelánico, ya que no tiene la misma dureza.
De manera que si se tiene un descuido y el pavimento se raya o lo golpea algo muy pesado siempre se podrá reparar de una manera sencilla y rápida.
Si colocamos microcemento en un pavimento exterior habrá que realizarle un tratamiento antideslizante.